La ciudad de Chemnitz hace un llamamiento a la fraternidad universal y programa la 'Novena sinfonía' de Beethoven bajo la dirección del español Guillermo García Calvo

   La ciudad alemana de Chemnitz está viviendo momentos de fuerte agitación social e incluso disturbios callejeros desde que la muerte de un ciudadano  presuntamente acuchillado por dos inmigrantes desató la semana pasada una oleada de ataques a viandantes que el Gobierno alemán no tardó en condenar. Ahora es la ciudad de Chemnitz la que trata de hacer un llamamiento a la calma, también a través de la música. El pasado día 3 unas 10.000 personas, según El Mundo, acudieron a un concierto rock "contra el racismo", bajo el lema "Somos más". Sin embargo, el evento musical de mayor trascendencia tendrá lugar mañana día 7 de septiembre en una de las plazas principales de la ciudad, cuando el director español Guillermo García Calvo, titular de las principales entidades musicales de Chemnitz, ofrezca su versión de la Novena sinfonía de Beethoven al frente de su orquesta, la Robert-Schumann-Philharmonie. Le acompañarán sobre el escenario los solistas y coro de la Ópera de Chemnitz, con los siguientes intérpretes: el tenor Siyabonga Maqungo, la soprano Christiane Kohl, la mezzo Sophia Maeno y el bajo Magnus Piontek.

   "Los teatros de Chemnitz emplean artistas de muchas nacionalidades que están preocupados por el desarrollo de los últimos días. Queremos que Chemnitz sea una ciudad de apertura al discurso de estos empleados... y que pueda obtener el título de Capital Europea de la Cultura -. Con una cultura que vive en el respeto de unos a otros", explica Christoph Dittrich, director general del teatro de Chemnitz.

   El propio director español ha tenido que salir al paso de la situación social escribiendo un artículo que la Ópera de Chemnitz ha hecho público: "Somos extranjeros donde quiera que vamos. Entonces deberíamos comportarnos con los demás como desearíamos ser recibidos en el exterior. Los músicos y los artistas no pueden salvar el mundo, pero tenemos una herramienta de ayuda: la música", explica García Calvo en el texto.

   "¡Creo en el poder de nuestro trabajo común en beneficio de la sociedad, por la tolerancia, el cosmopolitismo y la libertad!, explica García Calvo en su texto... Nuestro trabajo debería ayudar a doblegar las grietas y crear una unión", concluye el maestro español.

   Según ha podido saber CODALARIO, la iniciativa ha tenido una gran acogida en el seno de la música alemana, hasta el punto de que cantores de numerosos conjuntos se han presentado voluntarios para participar en el evento. Se trata de cantores de coros como el de la Deutsche Oper Berlin, la Staatsoper unter der Linden (Staatsopernchores Berlin), el de la Semperoper de Dresde, Mitglieder des Chores des Theaters Görlitz, Mitgieler des Chores des Theater Magdeburg o Mitglieder des RIAS Kammerchor, entre muchos otros.

Foto: David Bohmann