CODALARIO, la Revista de Música Clásica

Críticas

Crítica: Carlos Mena dirige a la Sinfónica de Galicia

7 de diciembre de 2021

Carlos Mena dirige obras de Vaugham Williams, Louise Farrenc y Arriaga al frente de la Orquesta Sinfónica de Galicia. Stefan Utanu deja la orquesta tras 27 años

Carlos Mena

Seguridad y sorpresas

Por Julián Carrillo Sanz | @quetzal007
La Coruña, 3 y 4-XII-2021. Palacio de la Ópera, Orquesta Sinfónica de Galicia. Programa: Juan Crisóstomo de Arriaga, Sinfonía en re menor; Vaugham Williams, Five variants od Fives and Lazarus; Louise Farrenc, Sinfonía nº 3 en sol menor, op.36. Carlos Mena, director.

   Hay quien dice que la música es una sucesión bien dosificada de seguridad y sorpresas. El concierto de la Orquesta Sinfónica de Galicia de este fin de semana previo al gran puente de diciembre ha sido rico en ambas. Y si no, que se lo digan a Stefan Utanu, que tocaba sus últimos conciertos antes de jubilarse con la que ha sido su orquesta los últimos 27 años. Antes del concierto, el gerente de la OSG, Andrés Lacasa, tomó la palabra para dedicárselo: era lo que cabe esperar, la seguridad. La sorpresa llegó al final del concierto, cuando Carlos Mena hizo su segunda entrada por la izquierda del escenario del Palacio de la Ópera para acercarse por la espalda a Utanu y dedicarle la ovación del público, que creció en calidez e intensidad al levantarse el músico para recibirla junto a un ramo de flores. Solo queda darle la enhorabuena y desearle que disfrute de su jubilación muchos y fructuosos años.

   La primera entrada de Mena por el lado de los violines primeros fue otra sorpresa, una de esas que el músico vitoriano gusta de dar en sus conciertos añadiendo pequeñas obras fuera de programa. Esta fue para cantar la canción de la que emana Five variants od Fives and Lazarus, la obra de Vaugham Williams que cerraba la primera parte del concierto. Fue una demostración de buen hacer vocal acompañado al arpa por Celine Landelle, la solista de la OSG, y la mejor presentación posible para la obra del inglés. Y si preciosa fue la introducción, mejor aún resultó la interpretación de Mena al frente de la Sinfónica, una versión de referencia y llena del mejor aroma de la música inglesa que logró una gran ovación del público coruñés.

Stefan Utanu

Stefan Utanu deja el seno de la Sinfónica de Galicia tras 27 años

   El programa tenía una estructura casi simétrica, con la obra de Vaughan Williams como clave central de un arco del que dos hermosas sinfonías, la Sinfonía en re menor de Arriaga y la Sinfonía nº 3 en sol menor, op 36 de Farrenc serían sus dos sólidas bases. Dos obras de gran corrección formal y notable inspiración escritas por dos autores que cualquier buen aficionado desearía que hubieran tenido la oportunidad de desarrollar completamente sus talentos. 

   Pero estos se frustraron por una muerte prematura y por haber nacido mujer, respectivamente, lo que no impide que la creatividad luzca en cada uno de los movimientos de sus obras. Mena y la Sinfónica, cuyo buen entendimiento ya hemos tenido ocasiones de comprobar, hicieron dos versiones brillantes de estas sinfonías, dejando un recuerdo excelente de ambas. Fue digno de recordar el aire entre beethoveniano y schubertiano por momentos de la de Arriaga y los destellos mendelssohnianos de la de Farrenc.  

   Como siempre que hay ocasión, los solistas de la OSG mostraron su calidad. En este sentido, cabe destacar los solos de Ruslana Prokopenko al chelo y de Ludwig Dürichen como violín concertino en la obra de Williams. Y, muy especialmente, los de flauta de María José Ortuño. Inspiradísima en todo el concierto, tanto en el Trio del tercer tiempo de la Sinfonía de Arriaga como, liderando el diálogo de las maderas con las cuerdas, a lo largo de la obra de Farrenc. 

Foto Carlos Mena: Web Musiespaña

Sinfónica de Galicia Carlos Mena