CODALARIO, la Revista de Música Clásica

Críticas 2015

Crítica: Recital de José Bros en el Teatro Campoamor

29 de mayo de 2015

ZARZUELA CON BEL CANTO

Por Javier Labrada

Oviedo. 29-05-2015. Orquesta Oviedo Filarmonía, director José María Moreno, solista José Bros. Obras de Chapí, Lacalle, Jacinto Guerrero, Soutullo, Vert, Carlos Gardel, Amadeo Vives, Agustín Lara, Jerónimo Giménez y Antón García Abril

   Ya han pasado algunos años desde que en 2006 el tenor José Bros pisara las tablas del Teatro Campoamor para recoger su premio al mejor cantante masculino de ópera en los Premios Líricos Campoamor. Cantó entonces la famosa aria de Tonio “Ah! mes amis”, una pieza representativa del repertorio más puramente belcantista y de interpretación reservada a los tenores más ligeros o con suficiente tesitura. Páginas que, en cualquier caso, poco tienen que ver con las ofrecidas este pasado  viernes durante el recital de zarzuela, de contenido mucho más lírico y que podrían parecernos, a priori, algo alejadas de las características vocales del propio Bros, especialmente si acudimos al teatro teniendo en mente las versiones de corte más dramático que tenores como Domingo han acabado por popularizar alrededor del mundo.

   Bros no es un tenor que destaque por la magnitud de su instrumento, ni quizás tampoco por una excepcional belleza tímbrica, sino por la genialidad de su fraseo y su talento innegable a la hora de colorear las frases, lo que unido a la excelente dicción y el control técnico del que hace gala le permite ofrecer recitales tan interesantes como el que comentamos. Recitales que, gracias a todo lo anterior, no se dejan empañar por unos agudos de emisión un tanto forzada y que parecen ir acusando los más de veinte años de carrera lírica.

   Parece la suya una forma de aproximación a la zarzuela hasta cierto punto cimentada en el bel canto que tantas merecidas satisfacciones le ha dado a lo largo de su carrera como cantante, un modo de interpretar que sentó mejor a algunas obras que precisan de una mayor capacidad de matización como “La roca fría del calvario” o “Por el humo se sabe donde está el fuego” frente a otras que parecen demandar voces más grandes y pesadas como “No puede ser” o “Granada”. Entre el resto de obras del programa cabe destacar la canción de Antón García Abril, “Canto porque estoy alegre” que el tenor quiso dedicar a su mujer vertiendo además grandes dosis de pasión que, unidas a su siempre exquisito fraseo, sentaron muy bien a la interpretación y abrieron el camino para las tres propinas ofrecidas a continuación: la célebre jota de “El trust de los tenorios”, una inspirada interpretación de “De este apacible rincón de Madrid” (romanza de la zarzuela “Luisa Fernanda”) y la ya mencionada romanza “No puede ser” de Sorozábal.

   Desde el escenario el tenor contaba con la ayuda de la Oviedo Filarmonía, conjunto que, bajo la batuta de José María Moreno,  fue el encargado de abrir el concierto con el Preludio de “El tambor de granderos” compuesto por Ruperto Chapí. Una pieza breve y enérgica con la que Moreno ya nos daba a conocer su forma de dirigir. Es la suya una batuta apasionada, vibrante, juvenil y de tiempos más bien rápidos, que, exceptuando algunos momentos de aparente confusión orquestal como el que se presentó al inicio del “Intermedio de la Boda de Luis Alonso” nos dejó un resultado bastante solvente al frente de la formación Oviedo Filarmonía, agrupación que parecía sentirse bastante cómoda a la hora de afrontar este tipo de obras. Al respecto de ese famoso Intermedio compuesto por Jerónimo Giménez cabe señalar la buena intervención del flautín y la flauta travesera, situándose bastante por encima de la de los trombones que, especialmente en los primeros compases, no lograron un buen empaste con el resto de la orquesta.

   Nos dejó por tanto la noche un recital interesante, no sólo por el buen hacer de Bros sino por la genial selección de obras, escogidas para el programa de entre lo más granado de la zarzuela española y lo más conocido de las canciones populares.  Páginas que, al fin y al cabo, siempre resulta placentero escuchar.

josé maría moreno oviedo filarmonia teatro campoamor josé bros recital lírico zarzuela
0 Comentarios
Insertar comentario

Para confirmar que usted es una persona y evitar sistemas de spam, conteste la siguiente pregunta:

* campos obligatorios

Aviso: el comentario no será publicado hasta que no sea validado.