El Círculo del Liceo otorgó el pasado jueves (18/11/10), en una cena de gala en el Salón de los Espejos del Gran Teatro del Liceo, la Medalla de Oro de la entidad a la soprano Montserrat Caballé por su ejemplar carrera artística, de más de 50 años de trayectoria. Ignacio García-Nieto, presidente del Círculo del Liceo, afirmó que para el club "es un honor" brindar este reconocimiento "a una estrella de la lírica internacional de la magnitud de Montserrat Caballé, una de las cantantes más importantes de las últimas décadas, dueña de una carrera artística única en la historia de la ópera. Y si a eso se unen sus 50 años de trayectoria artística, queda claro por qué el Círculo ha querido rendirle este homenaje. Es única. Se trata de una persona que ha tenido una vinculación muy especial con el Gran Teatro del Liceo, desde el cual ha proyectado al mundo su virtuosismo artístico y su entrega a la música".

El presidente del Círculo también afirmó que la nueva Sala de Audiovisuales Montserrat Caballé está equipada con una tecnología capaz de reproducir en alta definición, un prodigio técnico "que estará a disposición de los socios del Club y de sus invitados". Bautizarla con el nombre de la cantante catalana, apunta Ignacio García-Nieto "responde a las mismas razones por las cuales le damos nuestra Medalla a nuestra admirada Montserrat Caballé: no ha habido ninguna como ella. Personalmente no soy partidario de poner nombres a instalaciones, pero en este caso estoy convencido de que los socios del Círculo sabrán apreciar el gesto de la Sra. Caballé al permitirnos ligar su nombre a nuestro Club".

Montserrat Caballé se mostró muy sorprendida por el doble reconocimiento del Círculo del Liceo: "Cuando me lo pidieron fue una sorpresa, porque se trata de una entidad privada que ha querido hacerme este homenaje. El Círculo del Liceo de hoy es heredero de un patrimonio importantísimo y siempre ha estado ligado a mi trayectoria. Cuando yo estudiaba en el Conservatorio del Liceo, no entendía muy bien lo que era esta entidad, hasta que empecé a cantar. En 1962, cuando debuté en el Liceu, la familia Bertrand me invitó a cenar en el Círculo y la primera vez que entré me impresionó por toda la belleza que contenía -que desconocía- y por la amabilidad de sus gentes, casi todos liceístas que amaban la música y la ópera. Todo ello me fascinó. He aceptado esta propuesta por todo lo que le debo tanto a la familia Bertrand como a Marisol Rocha y a toda su familia, la del Dr. Rocha, mecenas míos en diversos campos, siempre dispuestos a tender una mano. A ellos les debo todo lo que he podido hacer".

La cena, a la que asistió el alcalde de Barcelona, Excmo. Sr. Jordi Hereu, contó con más de 200 asistentes, el máximo permitido por el aforo del Salón de los Espejos del Liceu. Las localidades se agotaron dos semanas antes del evento. También asistieron, entre otros, el Sr. Paul Sarkozy de Nagy-Bocsa -padre de Nicolas Sarkozy- y su esposa, la Sra. Paloma O'Shea -presidenta de la Escuela Superior de Música Reina Sofía-, Sra. Carmen Mateu de Suqué -presidenta del Festival Castell de Peralada-, Sr. Xavier Trias, Sra. Helena Rakosnik, Sra. Condesa de Godó, Sra. Mariona Carulla, Sr. Vilajoana, Sr. Joan Francesc Marco -director general del Gran Teatre del Liceu-, Sr. Oriol Aguilà -director del Festival Castell de Peralada-, Sr. Josep Mª Busquets -presidente interino del Orfeó Català-, Sra. Mª Angels Vallvé, Sr. Francisco Vilardell, Sr. Joaquín Barraquer, Sr. Josep Mª Puig, Sr. Antoni Puig, Sr. Joan Uriach, Sr. Carlos Cuatrecasas y Sr. Lluis Reverter. Durante la cena, la soprano, muy emocionada, realizó un largo discurso que conmovió a todos los asistentes.