Un reportaje de Agustín Achúcarro
El Conservatorio de Música de Valladolid cumple en 2018 cien años de historia, tal y como relata la actual directora y profesora de contrabajo Laura de la Hoz: “La fecha no coincide exactamente con la del Conservatorio sino con la primera Escuela de música, pues hasta 1928 no se reconocieron las enseñanzas profesionales, ni fueron consideradas una titulación”. Con respecto a este tema en el libro La Música en Valladolid en el Siglo XX su autora Mª Antonia Virgili reseña que “la prehistoria del Conservatorio de Valladolid se remonta al 19 de febrero de 1887, cuando una real orden del Ministerio de Fomento autorizaba a varias academias provinciales de Bellas Artes a establecer secciones de música”. El mismo libro avala lo comentado por la directora del Conservatorio cuando se refiere a que “por unos u otros motivos no será hasta 1918 cuando se abra una Escuela de Música en la ciudad”.
La efeméride, coincidente con las VI Jornadas Culturales, impulsa a realizar una serie de actividades, tal y como apunta Laura de la Hoz. “Vamos acelebrar el centenario a lo largo de todo el año y tenemos la intención de realizar actuaciones en todos los Centros Cívicos de Valladolid, concretamente los jueves, con la finalidad de que el Conservatorio salga a la ciudad y pueda compartir esta celebración, aunque el grueso de las actividades se centra en los días 14, 15 y 16 de febrero en las instalaciones del Conservatorio”. Concretamente los denominados Jueves musicales en los centros cívicos de la ciudad comenzarán el 8 de febrero en el de Zona Este con la actuación de Alumnos del Aula de Percusión. Mientras que en el Conservatorio está previsto que haya un acto inaugural, conciertos, clases magistrales, conferencias, talleres y mesas redondas. “Lo que se pretende -recalca la directora del centro- es que todos los que participen en estas actividades se hayan formado en el Conservatorio o hayan estado vinculados a él de alguna manera, aunque sabemos que no podemos alcanzar a todos y nos habremos dejado nombres en el tintero”. Terminarán las celebraciones del centenario en noviembre, coincidiendo con la fecha en la que se impartieron las primeras clases. Actos sobre los que se pretende editar un libro que recoja todo lo realizado en torno a esta efeméride.
La directora del Conservatorio insiste en lo que considera muy relevante para estas celebraciones: “Queremos compartir esta efeméride con la ciudad y que sepan que las puertas del Conservatorio estarán abiertas esos días en todas y cada una de las actividades, ya que lo que más nos seduce es que la ciudad participe de ellas”.
En síntesis, los conciertos comenzarán el día 14 a las 16h con el Concurso de solistas del Conservatorio, del que los que salgan elegidos participarán como tales en diversas actuaciones. A las 18h habrá un Concierto didáctico, El barco de Martín, dirigido a alumnos de Educaciones elementales. El día 15 desde las 20h actuarán la Orquesta de Cuerdas y la Orquesta Sinfónica del Conservatorio, dirigidas respectivamente por Ana Haliti y Mikel Zunzundegui, con obras de compositores vallisoletanos y se estrenará la obra Expandir de Francisco García Álvarez. Al día siguiente intervendrán la Banda Junior, desde las 17h, dirigida por Emilio González, a las 18:30 se ofrecerá un Concierto de exalumnos de guitarra, y desde las 20h intervendrá la Banda Sinfónica de Estudios Profesionales, al frente de la que estará el profesor de la asignatura y trompeta Diego Cebrián. Ese mismo día 16, a las 16:30h, se celebrará una Conferencia concierto sobre “Los instrumentos de cuerda pulsada del Renacimiento al Barroco” que dirigirá David Royán. Todos estos conciertos, a excepción del de guitarra y la conferencia concierto, que serán en el Aula P.02, se realizarán en la Sala de Cámara del Auditorio.
De entre las diversas ponencias, reseñar la dedicada a una figura tan relevante para el Conservatorio y la ciudad como es Pedro Aizpurúa, que impartirá el pianista Diego Fernández Magdaleno (Día 14 a las 18h), a la que precederá la realizada por el compositor Jesús Legido (a partir de las 17h). Concluirán ese día con “El órgano en la Iglesia rural de Valladolid en el siglo XVIII. Patrimonio perdido” por Ana Mª López (19h). Las ponencias continuarán el día 15, fecha en la que intervendrán los siguientes ponentes: Un acordeonista de la talla de Raúl Álvarez hablará sobre “El acordeón en Valladolid, una historia socio-cultural” (16h); “La Evolución de nuestro Conservatorio” correrá a cargo de Ángeles Porres, que fuera profesora y directora del centro (17h); Expondrá “Lo que no viene en los libros” Francisco García Álvarez (18h); Sobre “Erasmus + vivencias” disertará Ramiro Domínguez (18h); “El nacimiento de la Educación Musical Oficial en Valladolid: 1911-1928” lo impartirá Ignacio Nieto (19h). El día 16 Francisco González hablará sobre “El arco. Su función y su conocimiento” (16h). Todas serán en el Aula polivalente P.03 del Conservatorio, salvo la relacionada con los Erasmus que será en el Aula P.02.
El acto inaugural en la Sala de Cámara del Auditorio tendrá lugar el día 14, a partir de las 20h. En él tocarán diversos grupos de alumnos, con obras en su mayoría de compositores vallisoletanos, y se producirán las pertinentes alocuciones de las autoridades con el Consejero de Educación a la cabeza.
Laura de la Hoz también se refiere a algo que tiene un especial valor, ya que supone la presencia de dos músicos con una carrera ya relevante, vallisoletanos que estudiaron en Valladolid. “Contaremos con una clase magistral a cargo del violinista Roberto González-Monjas, que esa semana actúa como solista con la Sinfónica de Castilla y León, el día 14 de 16 a 19h en el Aula P.02 y también contaremos con la violonchelista Beatriz Blanco, aunque su clase magistral se hará fuera de estas fechas ya que no tenía días libres en febrero”. Y otra presencia también muy relevante será la del pianista y profesor de análisis Ángel Huidobro, que coincidiendo con el centenario de la muerte de Debussy dará un Curso de análisis-piano sobre el compositor francés (del que tiene grabados sus Preludios) los días 17 y 18 de marzo.
Habrá dos Mesas redondas en la Biblioteca del Centro Cultural Miguel Delibes, el día 15, a las 18:30h y el 16, a las 18h. La primera titulada “La enseñanza musical: evolución de los planes de estudio” y la segunda “¿Hay vida después del Conservatorio?”.
A esto se sumarán diferentes talleres como “Musicreando. Atrévete a componer un himno para el Conservatorio”, que en seis grupos diferentes dirigirá Suso González, quien invita a los alumnos de Educaciones profesionales a que se acerquen y vayan con su instrumento; el taller de cañas por Lola Díez, (día 14 en la Sala de estudios); un concierto taller de música minimalista y técnicas de música de cámara con el Ensemble de música contemporánea Butwhatabout, grupo que reside en La Haya y en el que se encuentra dos músicos formados en el Conservatorio, concretamente Daniel Bolado y Antonio Pierna (será en la Sala de Palmeras del Auditorio, el 14, a las 16h y 18h); un Taller de improvisación, dividido en varios grupos, con un máximo de diez alumnos, dirigido a todos los niveles y todos los instrumentos, por Sandra Ruibal, Paula Vegas y Violeta Díez; y el afinador Silvano Coello disertará sobre “Fundamentos sobre el funcionamiento del piano y teoría de su afinación”.
A los conciertos de la Sala de Cámara del Auditorio se accederá con invitación, que se puede recoger en la Conserjería del Conservatorio, mientras que las ponencias y las mesas redondas serán con entrada libre. Junto a estas actividades también figura un Concurso y exposición de carteles. Más información sobre las diversas actividades en la web conservatoriovalladolid.centros.educa.jcyl.es/sitio/
Cumplir cien años no es fácil y mucho menos cuando se echa la vista atrás y se comprueban las vicisitudes por las que ha pasado una entidad que ha estado a cargo de diferentes instituciones y que no ha pasado a pertenecer a la Junta de Castilla y León hasta 2006 –según señala la web del CCMD- y que no ocupó sus nuevas instalaciones del Centro Cultural Miguel Delibes, realizadas por primera vez expresamente para ser un Conservatorio, hasta 2007.
Antes perteneció a entidades varias como la Diputación de Valladolid y el Ayuntamiento. Durante ese tiempo ocupó los más diversos lugares, desde el Palacio de Santa Cruz y la Universidad a un piso de la calle Zúñiga, del que se fueron cuando amenazaba ruina. Pasaron entonces a una entreplanta en la calle Dos de Mayo y después a un Edificio de Sanz y Forés, conocido con mucha propiedad como Hospital Viejo, en donde compartían espacio con la Escuela de Asistentes sociales, ellos en el primer piso y el Conservatorio en la entreplanta y el segundo. De allí a la Casa Cuna, cuyo nombre delata que no estaba precisamente prevista para albergar un Conservatorio. A pesar de todo y de que en las nuevas instalaciones aún haya cosas pendientes que cubran todas sus necesidades, entre otras cosas disponer de una sala de conciertos propia, el Conservatorio está de aniversario. Y aquella escuela incipiente que contaba tan solo con 60 alumnos y la especialidad de piano, gracias al esfuerzo de no pocos, hoy anda en torno a 740 estudiantes y cuenta con 21 especialidades, por lo que merece la pena olvidar momentáneamente las posibles cuitas y unirse a sus celebraciones.