ABAO-OLBE recupera 'Faust' de Gounod once años después, con Eva Mei en el papel de Marguerite

 Los próximos días 14,17, 20 y 23 de noviembre ABAO-OLBE (Asociación Bilbaína de Amigos de la Ópera) recuperarará la ópera Faust de Gounod once años después su anterior representación en la Asociación. Este título, que es a la vez uno de los más populares del repertorio francés y la obra más conocida y representada de su autor, está basado en la inmortal obra de Goethe Fausto que también sirvió de inspiración para otras óperas de grandes compositores como Berlioz, Boito, Busoni. Gran espectáculo lírico en cinco actos cuya música está repleta de brillantes melodías características de la ópera francesa y cuyo argumento gira entorno a la leyenda de Fausto y su pacto con el diablo. El tenor polaco Piotr Beczala regresará a la ABAO tras sus interpretaciones verdianas de pasadas temporadas para dar vida a Faust. Papel en el que el gran Alfredo Kraus dejó su sello en Bilbao. El rol de la frágil ‘Marguerite' recaerá en la soprano italiana Eva Mei, quien pondrá voz a la famosa "aria de las joyas" en el que será su debut en la Asociación Bilbaína. Se presentará igualmente en ABAO el bajo francés Laurent Naouri como el malvado y maquinador Méphistophélès. Completarán el elenco de esta ópera los regresos del joven barítono Rodion Pogossov como Valentín, hermano de Maguerite y víctima de las maquinaciones de ‘Méphistophélès', y la mezzosoprano Alexandra Rivas como ‘Siebel' y los debuts de la mezzosoprano Nadine Weissman y el barítono Luis Cansino como Marthe y Wagner respectivamente.

Del apartado musical se encargará el joven maestro israelí  Rani Calderon quien debutará en la Asociación para ponerse al frente de la Orquesta Sinfónica de Euskadi. Este apartado lo completará el Coro de Ópera de Bilbao dirigido por Boris Dujin.  La producción, de corte clásico y cercano a la adaptación parcial que Gounod realizó de la compleja obra de Goethe, procede del Théâtre du Capitole de Tolouse y ha sido ideada por Nicolas Joël . Cuenta con la escenografía de Ezio Frigerio y el vestuario diseñado por Franca Squarciapino, ganadora en 1991 de un Oscar al mejor vestuario de la película Cyrano de Bergerac.