Tasto Solo y Acadèmia 1750, entre la oferta protagonista para el penúltimo fin de semana del FeMAP

   El fin de semana del 10 al 13 de agosto supone el inicio de la recta final para el Festival de Música Antiga del Pirineus [FeMAP]. La intensa programación de esta cita estival con las músicas históricas en el Pirineo Catalán va llegando a su fin tras seis semanas de actividad. Pero todavía quedan citas para los apasionados de la llamada música antigua, con agrupaciones de importancia como Tasto Solo, una de las formaciones especializadas en repertorio tardomedieval más destacadas del panorama internacional. La agrupación, conformada por la ocasión por la voz de la soprano Anne-Kathryn Olsen, las percusiones de David Mayoral y el organetto de Guillermo Pérez, lider y director artístico de la misma, ofrecerá su programa La flor en paradis. Polifonías & amor cortés en el Ars Antiqua en tres citas en las localidades de Salàs de Pallars, Llanars y Coll de Nargó. El siglo XIII fue un periodo esencial para el desarrollo y florecimiento de la polifonía en occidente. El motete, resultado de añadir nuevas voces sobre una melodía gregoriana preexistente, se convirtió en un vibrante vehículo para la exploración de técnicas de composición innovadoras y fórmulas contrapuntísticas. Pero, sobre todo, el motete presentaba un soporte estructural en el cual era posible combinar lo sacro y lo profano, lo literal y lo alegórico, el texto y su metatexto. Cantos llanos dialogan con poemas amorosos, en muchas ocasiones con dos o tres narraciones diferentes superpuestas en latín y en lenguas vernáculas, creando combinaciones entre realidad y metáfora. La Flor en Paradis presenta una cuidadosa selección de motetes compuestos durante los años 1250-1300.

   Acadèmia 1750, agrupación orquestal catalana de geometría variable, acude a las localidades de Bossòst y Gerri de la Sal en formato de cámara para ofrecer su programa A Favourite Concerto. Emilio Moreno [violín barroco], Laura Quesada y Joan Bosch [traversos barrocos], Guillermo Turina [violonchelo barroco] y Eva del Campo [clave] darán vida al género de la sonata en trío, que representó un punto de referencia clave para la música instrumental del período barroco. De esta estructura simple, basada en el diálogo de dos instrumentos melódicos sobre un acompañamiento, se derivaron las distintas combinaciones de la música de cámara barroca. El término música de cámara ya indica en la etimología que su destino era el de ser interpretada por músicos no profesionales en el ámbito doméstico o cortesano, en ejecuciones donde la existencia de público era excepcional. En la Península Ibérica, por desgracia, esta práctica musical no se produjo demasiado y los compositores que cultivaron esta música lo hicieron pensando en el mercado exterior. El programa de la Acadèmia 1750 gira alrededor de los hermanos Pla, prolíficos compositores de este género cuya música se encuentra en archivos de todo el mundo, y se completa con obras de otros autores nacionales de la misma época.

   Para concluir la oferta, la Orquesta Andalusí del Mediterráneo interpreta el programa Poetes andalusís: Nubas y melodías de Al-Àndalus, contando para la ocasión con un total de siete músicos. El público asistente a los conciertos de Tavascan y Berga será testigo de algunos ejemplos de la música andalusí que se inició en la Península Ibérica a través de los árabes que se establecieron en el sur y los emigrantes de Oriente Medio que se instalaron en el norte de África y en Al-Ándalus, la cual es resultado de una rica mezcla entre la música oriental con la música tradicional de cada uno de estos lugares. Se desarrolló a lo largo de los siglos y se ha mantenido viva hasta nuestros días gracias a los marroquíes que la han transmitido de generación en generación oralmente y cuidando su autenticidad. La Orquesta Andalusí del Mediterráneo nos invita a conocer el legado de los grandes poetas y músicos andalusíes. El repertorio se centra especialmente en las nubas, una forma poético-musical que representa el máximo esplendor del florecimiento musical de Al-Ándalus.

Fotografía: Robin H. Davies.